Esta disciplina holística trabaja la parte física y energética, aceptando al ser humano en su totalidad, por eso, naturalmente es integrada también la básica y poderosa energía sexual, que se activa, potencia y expande, para transformarse en energía mas sutil.
Se comienza con un ritual simple pero significativo, dando a la sesión un marco sagrado; continuando con un largo y amoroso masaje de todo el cuerpo, que crea un profundo estado de relajación y prepara el cuerpo para la parte más sensible. En este momento, la zona genital (lingam / yoni), es masajeada con sensibilidad y cuidado, la energía sexual, que se encuentra en los chakras inferiores, se despierta, y con suaves movimientos es dirigida y conectada con los chakras superiores y expandida hacia todo el cuerpo; esto crea ondas intensas de placer que se sienten no sólo en el área genital, sino en cada parte del cuerpo.
Durante el masaje lingam, se juega con el control de la eyaculación, haciendo que las ondas de energía suban y bajen mientras la energía se hace más y más fuerte, de esta manera toda la experiencia puede ser disfrutado por un período de tiempo más largo, así como podemos trabajar con esta energía en un nivel más profundo.
Aunque el masaje es sexualmente estimulante, y una eyaculación o un orgasmo puede ocurrir , este no es el objetivo del masaje sino un placentero extra..
